Magallanes perdió su primer encuentro de semifinales en condición de local y comienza a pensar en la revancha del próximo domingo en Curicó. Pese a la derrota la llave sigue abierta: Magallanes ganando por un gol forzaría una definición a penales.
Primer minuto de partido y Curicó ya había dado el primer golpe. Centro desde el sector derecho que fue conectado de cabeza por Franco Bechtholdt a la entrada del área chica y que dejó sin respuesta a Rodrigo Paillaqueo. Gol de camarín para los visitantes.
Con ese negativo arranque de partido, que no estaba en los planes de nadie, comenzó a desarrollarse la primera semifinal entre Magallanes y Curicó Unido en el Estadio Nacional.
Luego del gol Magallanes tomó el control del partido y comenzó poco a poco a acercarse al arco defendido por Santelices. Curicó en tanto, apostaba a dañar de contragolpe por intermedio de la rapidez de sus delanteros.
Luis Fernández desde fuera del área y Paulo Cárdenas tenían las más claras para la Academia. Los torteros respondían por intermedio de Churín y Díaz. El partido era abierto pero los espacios eran mayores en la retaguardia albiceleste. Así, con el 0-1 en el marcador se fueron al descanso.
Recién iniciada la segunda mitad la visita tuvo el segundo pero la definición de Christopher Díaz salió pegada al palo izquierdo de Paillaqueo. Luego de esa jugada la tónica se repetía: Magallanes controlaba el balón y Curicó se replegaba para salir rápido de contrataque.
Estaban en eso cuando luego de un tiro libre servido por Luis Fernández, que fue contenido providencialmente por Santelices y el vertical, Maximiliano Alaniz la empujaba para decretar el 1-1. El “Lechuga”, quien había ingresado por Carlos Cisternas, hacía abrazarse ilusionada a la familia magallánica que llegó hasta el Nacional.
Sólo tres minutos más tarde, cuando la ilusión de la victoria comenzaba a hacerse presente, vino una jugada clave que marcó el trámite de lo que restó de encuentro. Falta intrascendente de Luis Fernández en la mitad de la cancha y Carlos Ulloa le muestra la segunda amarilla. A las duchas el volante paraguayo y Magallanes con diez hombres hasta el final del partido.
Pese a la desventaja numérica los albicelestes no renunciaban a atacar dejando cada vez más desprotegido el arco defendido por Paillaqueo. Los delanteros curicanos parecían más peligrosos con espacios y Prieto y Miranda debían enfrentarlos mano a mano cada vez con mayor regularidad.
Precisamente en un uno contra uno entre Churín y Prieto vino el 2-1 para la visita en el minuto 78. El delantero trasandino le gana en carrera al defensa paraguayo y define cruzado ante el desesperado achique de Paillaqueo.
En los minutos finales Magallanes estaba volcado completamente en ataque pero la defensa de Curicó se mostraba sólida en sus respuestas. Así, con el marcador 2-1 favorable a la visita, terminó el partido.
La Academia pierde así su primer encuentro del año en condición de local y ya comienza a pensar en la revancha del próximo domingo en Curicó. Pese a la derrota la llave sigue abierta y la ilusión intacta. Magallanes ganando por un gol forzaría una definición a penales. ¡Vamos muchachos que lo damos vuelta!
Fuente texto y fotos: www.clubmagallanes.cl