Un poco de historia… El Carpaccio nace en la Venecia del primer tercio del siglo XX, en el cual una condesa, que dirigiéndose a su restaurant favorito, habría solicitado un plato con alguna carne cruda debido a que su médico le había aconsejado comer carne sin cocer para sanar su anemia.
Ingredientes:
- 400 a 500 grs. de salmón (congelado)
- Jugo de 2 a 3 limones
- 2 cucharadas de aceite de oliva
- Pimienta negra
- Sal
- 2 cucharadas de alcaparras
- 100 gramos queso parmesano
Preparación:
- Cortar el salmón en láminas muy delgadas y disponerlas en un plato grande, una al lado de otra.
- Hacer una limoneta con aceite y jugo de limón.
- Poner las alcarras sobre el salmón
- Agrgar sal y pimienta a gusto
- Rallar finamente el queso parmesano encima de la preparación
- Servir frío. Se puede acompañar con pancitos fritos o tostaditos.
Tip’s: Es imprescindible servir esta entrada fría, para asegurar la cadena sanitaria y disfrutar tranquilamente en buena compañía con una copa de vino blanco.